RONCAGLIA, SILVIA / LUCIANI, ROBERTO (Ilustración)
Santi está enfadado porque su madre no le ha comprado un par de botas. Se desahoga con Lumpi Lumpi, pero el dragón se pone también caprichoso porque quiere un sombrero de plumas. ¡Qué aventura y qué travesuras cuando lleguen a la tienda del señor Fábula, que vende zapatos y sombreros mágicos!