En Confesión de un asesino se nos narra a lo largo de una noche la historia de Golubtschik, hijo ilegítimo de un príncipe ruso y ex-agente de la Ojrana, la temible policía secreta de los zares. El auditorio, compuesto por los parroquianos del restaurante ruso Tari-Bari de París, escuchan atónitos frente a unas copas de licor, una confesión que es también una fábula sobre el Mal y su poder hipnótico de atrapar a sus víctimas en historias circulares y obsesivas que se estrechan inexorablemente como nudos corredizo.
Joseph Roth (Brody, 1894-París, 1939). La amarga experiencia del derrumbamiento del mundo de los Habsburgo y sus consecuencias psicológicas, así como la obligada marcha de los judíos de Europa central hacia Occidente, fueron desde el inicio los temas centrales en su obra. En 1933, emigró a Francia, donde murió. Desde entonces es considerado, con creciente unanimidad, como uno de los mayores talentos de nuestro tiempo.