Nos pasamos toda nuestra infancia deseando ser mayores para poder hacer cosas de mayores. Y cuando somos mayores añoramos, desesperadamente, esa facilidad que de pequeños teníamos para ser felices con cualquier cosa y con cualquier situación en la que pudiéramos estar.
Ximo Abadía se resiste a esta costumbre y nos muestra un catálogo de deseos (suyos y que desde este mismo momento hacemos propios) que deberían hacerse realidad sea cual sea la edad. Porque este no es un libro para niños, o no solo para niños. Es, en realidad, una lista de tareas que tenemos que repasar una y otra vez para cumplirlas todas y cada una sin excepción: mirarnos el ombligo antes de ir a trabajar, reír mucho, pintar en el suelo de nuestro cuarto, bañarnos con el culo al aire.
Invitamos a todos nuestros lectores a seguir estos sabios consejos y a apuntar todos aquellos que Ximo ha olvidado y solo nosotros, en nuestro interior, sabemos que tenemos que seguir realizando. Yo también de mayor quiero ser pequeño.