La segunda novela de Bernard Malamud, originalmente publicada en 1957, narra la historia de Morris Bober, un tendero en el Brooklyn de la posguerra, que quiere lo mejor para él y para su familia. Su mujer, Ida, le ayuda en la tienda de ultramarinos y está todo el día pendiente de él. Helena, una belleza de veinticuatro años hija del matrimonio, ha sacrificado su formación para ayudar económicamente a sus padres. Por las noches lee a Tolstoy y Dostoievski y aspira a estudiar literatura. Viven en un mundo letárgico dominado por el ritmo del paso del tiempo, hasta que dos ladrones atracan la tienda y retienen a Morris. Las cosas mejoran poco a poco cuando Frank Alpine, inmigrante italiano, se convierte en su ayudante. Sin embargo, la situación volverá a complicarse cuando Frank, cuya actitud ante los judíos es algo ambivalente, se enamora de Helena al mismo tiempo que empieza a robar en la tienda. Esta novela evoca de manera precisa el mundo de la inmigración, lleno de circunstancias complejas y grandes expectativas. Malamud definió la experiencia del inmigrante de tal modo que ha resultado vital para las siguientes generaciones de escritores.
Bernard Malamud es un maestro del relato. Su capacidad para aunar lo cómico y lo trágico, lo particular y lo universal, lo genuinamente yiddish y lo propiamente estadounidense lo convierten en un escritor único. Este volumen reúne todos sus cuentos, que se editaron póstumamente en 1997 en su edición original.