En El espacio intermedio se reúnen algunos textos de diferente calado e intención sobre el arte de hoy y los problemas estéticos que plantea la percepción contemporánea de la obra de arte. Son más bien interpretaciones, si se quiere, de marcado acento temporal, que intentan, sencillamente, implicar al lector en el proceso de apreciación y discusión del arte, su historia y las narrativas que a lo largo del tiempo nos han aproximado a su origen y configuración. Es cierto que las obras de arte tienen algo de casual. «Sintetizan una azarosa coincidencia de factores perceptivos, sensibles, históricos e incluso narrativos que van más allá de la voluntad del artista. Cada obra de arte nueva es algo así como un canto rodado, una pequeña piedra de la playa que el artista lanza con fuerza en ese mar que es el tiempo. Por lo general se hunden apenas tocan el agua y sólo algunas vuelan rasantes sobre la superficie y trazan un garabato fugaz que desaparece con el batir de las olas. En raras ocasiones dejan una pequeña estela que dibuja un motivo insólito sobre el agua: esta es la obra de arte. Alguien convertirá en historia de los signos aquella marca fortuita apenas entrevista. Ese alguien es el lector.»