De entre todas las páginas italianas que ocuparon la obra de esta original y algo excéntrica autora, sobresalen estas miniaturas sobre Roma, la ciudad que conoció a fondo y por la que pasea una mirada de múltiples intereses, casi impresionista. La erudición estética no está reñida con la anécdota, ni con la hilazón de fragmentos que parecen yuxtaponerse como las estructuras de Piranesi, el artista que según Vernon Lee mejor comprendió Roma. Resulta una delicia seguir los pasos de esta italiana de corazón y dejarse atrapar por su espíritu iconoclasta, por sus juegos de imágenes y por la erudita lupa que aplica sobre rincones, edificios y obras de arte a las que ilumina de forma magistral.
Vernon Lee es el pseudónimo de la escritora inglesa Violet Paget (1856-1935). Poeta, novelista, autora de cuentos sobre fantasmas, fue también ensayista de arte y música sobre el país al que dedicó gran parte de su esfuerzo intelectual: Italia. Mujer de recio temperamento e inteligencia inusual polemizó con escritores como Oscar Wilde o Henry James y cultivó la amistad de Edith Wharton, G.B. Shaw o Robert Browning. Fue la responsable de introducir el concepto de empatía relacionado con la apreciación artística en la cultura anglosajona. Largamente olvidada tras su muerte, fue redescubierta en la década de los noventa por la investigación feminista. Es autora de una amplísima bibliografía sobre temas de arte y estética italiana, relatos de viajes y poemarios.