En los siglos xv y xvi se produce el paso entre dos cosmovisiones fuertemente troqueladas en la conciencia occidental. Denominado este período como Renacimiento, se presenta entre dos grandes crisis económicas y sociales como una búsqueda de nuevos desarrollos e interpretaciones de gran brillantez, a partir de los cuales se modifica paulatinamente y se abandona la imagen sustentada en la Filosofía antigua, sin alcanzar plenamente la Cosmología moderna. A pesar de los intentos de renovación, la imagen aristotélicoptolemaica del mundo antiguo constituye el telón de fondo sobre el que las innovaciones se proyectan, sin encontrar todavía un nuevo marco que supere la Philosophia naturalis tradicional. La ciencia, la técnica, la magia y la astrología constituyen ámbitos donde se busca un cambio difícil de concebir.