El hombre ha muerto. Dios ha muerto. La vida náusea, una mera existencia ausente de todo significado, que hace del hombre un simple diente de un engranaje perdido en una inmensa máquina irracional. La única vía de escape está en alcanzar un éxtasis de fantasía a través de las drogas, el desenfreno sexual, la experiencia final elusiva, el absurdo y la locura Esa fue la mentalidad dominante en el mundo occidental a lo largo de la segunda mitad del siglo XX. Ahora la pregunta es: ¿cómo llegamos a ella? Y el reto que tenemos delante: ¿cómo superar esta herencia y conseguir que la fe cristiana adquiera un sentido relevante en la sociedad del siglo XXI? Francis Schaeffer describe en el presente libro como la filosofía y el arte se han visto afectados por el dualismo, que ha dominado el pensamiento occidental a partir del Renacimiento. Explica como ese dualismo, que conduce a un escapismo de la racionalidad a la irracionalidad, se halla presente en la literatura, en el arte, en la música, el cine, el teatro, la televisión y cualquier otra manifestación de la cultura popular. Y plantea con claridad y firmeza cual ha de ser la postura cristiana al respecto.