Luego de un largo
silencio debido a su enfermedad, Marguerite Duras publica en 1990 La
lluvia de verano, ambientada en Vitry. En 1984, en esos mismos suburbios
parisinos, había filmado su última película, Los niños, de la que surge
este libro. La novela narra la historia de una familia de inmigrantes que
vive de subsidios gubernamentales: el padre, la madre y sus siete hijos
Ernesto, Jeanne, y los así llamados brothers and sisters. Cierto día,
Ernesto encuentra un libro quemado y descubre que ya sabe leer aunque nunca
aprendió a hacerlo (en cierto sentido, el libro del mito personal de
Marguerite Duras). Aun así va a la escuela pero de inmediato decide no ir
más, pues asegura que 'en la escuela me enseñan cosas que no sé'. A fuerza de
comprender sin aprender un conocimiento que inquieta y perturba, Ernesto ya
sabe demasiado. Como en el caso de Ágata, es también una historia de amor
entre hermanos, con los elementos que reaparecen habitualmente en la obra de
Duras.
Marguerite Duras nació en la Indochina francesa en 1914 y murió en París en 1996. En 1932 se trasladó a París, donde estudió derecho, matemáticas y ciencias políticas. En 1943 publicó su primera obra, La impudicia, a la que seguirían más de veinte novelas, guiones cinematográficos y textos dramáticos. Entre ellos, Moderato cantabile, El vicecónsul, El arrebato de Lol V. Stein, Los ojos azules pelo negro, Emily L., Los caballitos de Tarquinia, El amor, Destruir, dice, El amante de la China del Norte y Un dique contra el Pacífico. Tras una profunda crisis, marcada por el alcoholismo, escribió tres obras maestras: El hombre sentado en el pasillo, El mal de la muerte y El amante, célebre novela que inspiró una película homónima de Jean-Jacques Annaud.