Si ha habido una mujer destinada a brillar, esa es Beatriz Calanda, cuya vida exagerada y excesiva recorre los sesenta últimos años de la historia de España. Carne de las revistas de sociedad, con una vida cincelada a golpe de glamour, escándalos y exclusivas, gran dama de la jet-set madrileña, todo el mundo sabe perfectamente quién es Beatriz Calanda y quiénes fueron sus cuatro maridos (un actor de moda, un gran intelectual de izquierdas, un aristócrata y un banquero).
Sí, todos la conocen, pero muy pocos, ni siquiera sus maridos, mucho menos sus hijas, saben quién era en realidad. Para descubrir qué se oculta tras esta deslumbrante fachada habrá que viajar al pasado, a su adolescencia en el Madrid de la Transición y a la juventud de su madre durante los oscuros años de la posguerra.
En una historia que nos remite a La feria de las vanidades, de W. M. Thackeray, Carmen Posadas elabora una irónica y desopilante vivisección de la tan exclusiva como hermética alta sociedad madrileña.
Carmen Posadas reside en Madrid desde 1965, aunque pasó largas temporadas en Moscú, Buenos Aires y Londres, ciudad en la que su padre desempeñó cargos diplomáticos. La colección de relatos titulada Nada es lo que parece (1997) la consagró como autora de éxito entre lectores y críticos, distinción que ya había alcanzado con la publicación, un año antes, de su primera novela, Cinco moscas azules (1996). Ha escrito, además, varios libros de literatura infantil, entre ellos El señor viento Norte, que obtuvo el Premio del Ministerio de Cultura al mejor libro infantil editado en 1984, y ha colaborado en la elaboración de guiones para el cine y la televisión.