Las excelentes ediciones críticas del Nuevo Testamento pueden llevar a pensar que, tras años de exhaustivos análisis, tenemos a nuestra disposición el texto que salió de las manos de sus autores.
Sin embargo, en las últimas décadas los estudios de crítica textual muestran una realidad mucho más compleja: no solo resulta imposible recuperar el texto original, sino que se debe prestar atención a cómo ese texto fue modificado cuando se copió. Cada manuscrito y sus variantes se convierten en pruebas de un texto vivo, así como en ventanas por las que asomarse al mundo social del cristianismo primitivo.
Las implicaciones teológicas de esta realidad no son pequeñas. El complicado proceso de copia impide todo intento de convertir el Nuevo Testamento en un texto divinamente inmutable en su literalidad. Al mismo tiempo, pone de manifiesto la dependencia del texto respecto de la comunidad donde se lee y escucha, hasta el punto de plantear preguntas candentes sobre la autoridad del texto mismo.
Juan Chapa Prado es profesor de Nuevo Testamento en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra y editor de papiros cristianos en la prestigiosa colección «The Oxyrhynchus Papyri» de Oxford.
Juan Chapa es Profesor Ordinario de Nuevo Testamento en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra y miembro del comité de redacción de la Sagrada Biblia preparada por esa misma Facultad.