El gran historiador británico nos ofrece en este libro un detallado análisis histórico de la evolución de la nación moderna en los últimos 200 años, desde el protonacionalismo popular hasta la actualidad, procurando distinguir cuidadosamente lo que es historia real de lo que no pasa de ser «mitología programática», y poniendo de relieve la contradicción que parece existir entre la actual reafirmación política de las nacionalidades y la lógica de la integración económica que las empuja, como en el caso de la Unión Europea, a una supranacionalidad cada vez mayor.