La vista del golfo desde el promontorio de Posilipo, teniendo cerca el mar y abarcando de un solo golpe toda la extensa bahía con sus islas de Capri, Prócida o Ischia en el fondo, deja en la retina una impresión tal de color, luz y belleza, que ha de transcurrir mucho tiempo antes que se esfume y disuelva el panorama azul con reflejos de oro.
Vicente Blasco Ibáñez (1867-1928) fue "un agitador, un artista enamorado de la acción", un novelista enérgico y comprometido con las clases populares. Encarcelado repetidamente por antimonárquico y anticlerical, su oratoria apasionada despertaba el entusiasmo popular, y sus novelas se vendieron por miles y se tradujeron en toda Europa. Tras una manifestación contra la guerra colonial, tuvo que ocultarse unos días en casa de un amigo republicado, y allí, en unos cuadernos escolares, escribió el pequeño cuento que más tarde se convertiría en su novela más famosa: La barraca.