Todos tenemos, en un lugar u otro de nuestro rostro, alguna peca o algún lunar. Todos ellos poseen un significado concreto relativo a nuestra personalidad o a nuestro destino: La antigua tradición china que ha estudiado todo lo relativo a las pecas (forma, disposición y situación en la compleja geografía del rostro) nos ofrece el apasionante mensaje de las pecas.