El éxito de C.I.S. Mujeres desesperadas y Perdidos ha ayudado a poner de moda en España la televisión norteamericana, la más compleja, rica y estimulante del mundo. Desde que el monopolio de las tres grandes cadenas se rompió en la década de los ochenta, el mercado televisivo se ha enriquecido con la llegada de los canales de cable como HBO y la irrupción de nuevas cadenas, que han hecho una programación de series dirigida a segmentos de audiencia cada vez más exigentes, cultos y sofisticados. A su capacidad para desarrollar personajes y tramas, el drama actual ha ido añadiendo riqueza visual ( (Twin Peaks), sofisticación (Los Soprano), planteamientos arriesgados (24) y contenidos cada vez .más provocativos (Nip/Tuck, a golpe de bisturí). Y lejos de contentarse con hacer un producto de calidad, la industria del entretenimiento refleja en sus series, cada vez más, los principales problemas de la actualidad e incluso realiza una crítica mordaz de la sociedad.