El retrato de un político extraordinario. Alfredo Pérez Rubalcaba fue una figura singular y decisiva en todos los ámbitos de la política española de las últimas décadas. Químico de formación, cambió muy pronto la bata blanca del laboratorio por el traje y la corbata, más propios de los pasillos del Congreso en el que representó a los españoles durante seis legislaturas. Consagró treinta años de su vida a la construcción y al fortalecimiento de la democracia, hasta el punto de que ninguno de los grandes acontecimientos sucedidos desde el primer gobierno socialista hasta nuestros días puede explicarse sin su presencia. Su temprana e inesperada muerte nos arrebató a un hombre de Estado en el mejor sentido de la expresión. Inteligente y lúcido, fue un rival temido por sus adversarios, pero también respetado por su lealtad y discreción, por su elegante forma tanto de dedicarse a la política como de abandonarla. Quizá porque ya no quedan perfiles como el suyo, su desaparición causó un impacto profundo entre los ciudadanos que, al margen de ideologías y por encima de las diferencias políticas, supieron reconocer su honradez, su talento y su generoso servicio al Estado. Antonio Caño compartió con Rubalcaba sus últimos años en el Comité Editorial de El País, una etapa difícil en la que fue testigo de las inquietudes y desvelos de un hombre que siempre antepuso los intereses de España a los suyos. Esta biografía, que cuenta con los testimonios de amigos y colaboradores, así como con documentos inéditos en los que dejó reflejado su pensamiento, llena un vacío clamoroso en torno a su figura. A falta de esas memorias que Alfredo nunca quiso escribir, sirva este libro como homenaje al legado de un político de verdad.
Antonio Caño inició su carrera como reportero en la Agencia Efe. En África, América u Oriente Próximo informó sobre la caída de dictadores como Francisco Macías o Antonio Noriega, de guerras como la del Líbano o las Malvinas. En 1982 se unió a El País y fue su corresponsal en México, Centroamérica y Estados Unidos, donde cubrió las presidencias de Clinton, Bush y Obama. Fue redactor jefe y subdirector de Internacional, de la edición dominical, y director del diario entre 2014 y 2018.Durante su etapa como responsable del periódico, impulsó una profunda reforma digital y la expansión de sus ediciones en América Latina, lo que llevó a El País al liderazgo en difusión tanto en España como en el resto del mundo en lengua española.En la actualidad es socio director de Estudio de Comunicación, donde lidera el área de Relaciones Institucionales y Asuntos Públicos. Es columnista en The Objective, colaborador en radio, televisión y autor del libro Rubalcaba: un político de verdad. Recibió el premio Ojo Crítico de Radio Nacional de España, fue distinguido con la Gran Cruz del Mérito Civil por el rey de España y con la Orden Bernardo OHiggins concedida por la República de Chile.