La inmortalidad del alma, la condena del suicidio y la perspectiva de alcanzar una felicidad eterna, son creencias que han compartido la mayoría de las religiones occidentales, como así también aquellas filosofías que entienden al hombre como un ser que posee, en mayor o menor medida, una naturaleza divina. Negar tal linaje celestial no debería devolvernos una imagen miserable de la estirpe humana sino más bien, y tal como sostiene Hume, nos permitirá preguntarnos una vez más por el justo valor y la meta de nuestras vidas.
David Hume (1711-1776). Famoso filósofo e historiador, máximo representante del empirismo inglés. Con Gibbon inició un nuevo metodo historiográfico. Partiendo del empirismo, dedujo el fenomenismo y, negando todo valor al principio de causalidad, llegaría al escepticismo. Entre sus obras destacan: Tratado de la naturaleza humana, Ensayos filosóficos, Discursos políticos, Historia de Inglaterra, Diálogos sobre la religión natural, Historia natural de la religión, De las pasiones, De la tragedia, Investigación acerca de los principios de la moral, Autobiografía (post.).