La autora de Dios vuelve en una Harley nos sorprende con una nueva aventura que dejará huella en el corazón de los lectores. Cautelosa y conservadora, Molly Driscoll sigue trabajando en el mismo hospital en el que completó su formación como enfermera hace más de una década. Cuando a su ex marido, Jason, le diagnostican un cáncer, Molly le propone un trato: si él acepta someterse a una quimioterapia, ella hará un cambio radical en su propia vida. Él acepta, y Molly abandona el trabajo, cambia su coche por una motocicleta Harley Davidson y se convierte en «enfermera itinerante». A lo largo del camino, Molly se enfrentará a difíciles pruebas, vivirá momentos extraños y tiernos con sus pacientes, topará con un posible acosador y conocerá a un compañero muy peculiar. Ralph es, como ella, un enfermero itinerante y un fan de la moto americana por excelencia. Pero, además, asegura ser un ángel.
Dios vuelve en una Harley es la primera novela de esta escritora norteamericana, que vive y trabaja actualmente en California. Partiendo de una sociedad en la que el culto al cuerpo y a la juventud son casi un dogma de fe, la autora profundiza en las falsas necesidades que la cultura occidental impone, buscando rescatar un concepto antiguo y perdido: la felicidad. Un camino largo y circular, porque comienza y termina en uno mismo. En la línea de la reciente corriente de pensamiento norteamericano que invita a la aceptación y al reencuentro con nuestra propia naturaleza, Brady propone un nuevo sendero hacia la espiritualidad que transcurre por los vericuentos de la vida cotidiana.