Quizás hoy provoquen vergüenza nuestras prisiones. El siglo XIX se sentía orgulloso de las fortalezas que construía en los límites de las ciudades y, a veces, en el corazón de éstas. Se complacía en esa nueva benignidad que reemplazaba los patíbulos. Se maravillaba de no castigar ya los cuerpos y de saber corregir en adelante las almas.
Aquellos muros, aquellos cerrojos, aquellas celdas figuraban una verdadera empresa de ortopedia social. Quienes robaban eran encarcelados, también aquellos que violaban o mataban. ¿De dónde proviene el curioso proyecto de encerrar para corregir, disciplinar, controlar, que traen consigo los códigos penales de la época moderna? ¿Es una herencia de las mazmorras medievales?
Más bien, una tecnología novedosa: el desarrollo de un conjunto de procedimientos de coerción colectiva para dividir en zonas, medir, encauzar a los individuos y hacerlos a la vez dóciles y útiles. Vigilancia, ejercicios, maniobras, puntajes, rangos y lugares, clasificaciones, exámenes, registros: una manera de someter los cuerpos, de dominar las multiplicidades humanas y de manipular sus fuerzas, que fue desplegándose en los hospitales, en el ejército, las escuelas y los talleres: la disciplina.
El siglo XIX inventó, sin duda, las libertades, pero les dio un subsuelo profundo y sólido: la sociedad disciplinaria, de la que aún dependemos
Michel Foucault (Poiters, 1926 ? París, 1984), es filósofo, historiador y sociólogo francés, fue profesor en numeras universidades tanto francesas como norteamericanas, para acabar ocupando una cátedra en el Collège de France.
Hijo de un eminente cirujano de la zona de Vichy, Foucault no destacará en los estudios hasta llegar a la École Normale Supérieure, paso previo para acceder a la Universidad, donde cursó filosofía y psicología. Ejerció de profesor en diversas universidades en Francia, Suecia, Varsovia y Tunez, mientras terminaba su doble tesis doctoral.
En 1966 publica Les Mots et les choses, uno de sus más importantes aportaciones al estructuralismo junto a Jacques Lacan, Claude Lévi-Strauss y Roland Barthes.
Michel Foucault es también autor, entre otros libros, de Historia de la locura, Vigilar y castigar, Historia de la sexualidad ,-de la cual tan sólo concluirá 3 volúmenes-, Enfermedad mental y personalidad, Tecnologías del yo o De lenguaje y literatura, los tres últimos igualmente publicados por Paidós.