Una década después de su repentina muerte, el célebre exegeta Raymond E. Brown sigue iluminando a estudiosos y predicadores, estudiantes y agentes de pastoral, laicos y personas consagradas. Su último libro, publicado unos días después de su muerte, formaba parte de una serie de seis estudios sobre la predicación de la Sagrada Escritura siguiendo el año litúrgico.
Como observa Witherup en el prólogo, Brown «tenía la rara capacidad de exponer con sencillez investigaciones bíblicas complejas de una manera que no bajaba el nivel intelectual del material, sino que permitía que fuera comprendido por un amplio público... Y lo hacía de un modo que era sugerente y a la vez instructivo».
Para aquel amplio grupo de destinatarios y para toda una nueva generación de lectores y predicadores de la Palabra, este libro será una fuente de inspiración y conocimiento al que acudirán una y otra vez.
Raymond E. Brown era considerado como uno de los principales expertos en Sagrada Escritura de los Estados Unidos. Era profesor emérito de Estudios Bíblicos en Nueva York y fue en dos períodos miembro de la Pontificia Comisión Bíblica.