Amélie Nothomb en plena forma: un elogio de la lectura nada trivial, nada previsible y, sobre todo, nada inocente. Ange tiene diecinueve años, vive en Bruselas y estudia filología. Para ganarse algún dinero, decide comenzar a impartir clases particulares de literatura a un adolescente de dieciséis años llamado Pie. Según su despótico padre, el chico es disléxico y tiene problemas de comprensión lectora. Sin embargo, el problema real parece ser que odia los libros tanto como a sus padres. Lo que a él le apasiona son las matemáticas y, por encima de todo, los zepelines.Ange le va proporcionando lecturas a su alumno, mientras el padre espía clandestinamente las sesiones. De entrada, los libros propuestos no generan más que rechazo en Pie. Pero poco a poco Rojo y negro, La Ilíada, La Odisea, La Princesa de Clèves, El diablo en el cuerpo, La metamorfosis, El idiota empiezan a surtir efecto y despiertan preguntas e inquietudes.Y poco a poco, la relación entre la joven maestra y su más joven discípulo se estrecha hasta que el vínculo entre ambos se transforma.La literatura ejerce una fuerza, como el gas que permite
Amélie Nothomb nació en Kobe (Japón) en 1967. Proviene de una antigua familia de Bruselas, donde reside actualmente, aunque pasó su infancia y adolescencia en Extremo Oriente, principalmente en China y en Japón, donde su padre fue embajador. Habla japonés y trabajó como intérprete en Tokio. Es una de las autoras francesas más populares y con mayor proyección internacional.