ste peculiar libro de viajes relata el encuentro de Sinclair con una vastedad geográfica y cultural inabarcable: de punta a punta del país, de una costa a otra, el autor sale a la busca de nombres esenciales para comprender su prosa, su visión del mundo y su acidez conceptual, de Malcolm Lowry a Jack Kerouac, de Charles Olson a William Burroughs, y de Gary Snyder a toda clase de mitos, paisajes y recuerdos que han moldeado el imaginario colectivo, con particular interés (aunque no exclusivamente) por la Generación Beat y los grandes espacios abiertos de América. Asimismo, Sinclair también busca el fantasma de Roberto Bolaño en Barcelona y en Blanes, o los de Malcolm Lowry o William Burroughs en California.