Una impactante metáfora del terror y la sinrazón de los regímenes totalitarios en cualquier tiempo y lugar.
Un joven reportero debe cubrir un acontecimiento político en una ciudad cercana. Al llegar, es testigo del extraño comportamiento de sus habitantes y del ambiente terrorífico que se respira en ella. Una joven le explica lo natural que es para ellos que se les quite la vida, se les amortaje y entierre. El automatismo de los ciudadanos, que obedecen ciegamente las órdenes de unos papelitos amarillos que llevan consigo, parece responder a la llegada de una nueva era... Atrapado entre el sueño y la realidad, asustado y confundido, el reportero se adentra en un bosque, donde es atraído por una extraña luz que le hará comprender el macabro juego de la Historia y el manejo que los «monstruos» hacen de ella.