Pepita Jiménez Carreras ha hecho que se cumpla el sueño de María Zambrano con un trabajo riguroso y mucho respeto por las personas que aparecen en el libro. Ha evitado que los escritores se hicieran pasto de profesores, como le gustaba decir al habanero.
Ha vuelto a unir en una sola soledad la de Pepe Lezama y la de la muchacha de Málaga que desembarcó un domingo en La Habana.Esa tarde, el poeta corrió a su casa de la calle Trocadero y, frente a un vaso de café con leche y unas empanadillas de guayaba, hizo los apuntes para un poema dedicado a María: Vivirla, sentirla llegar como una nube.
Edición, introducción y notas a cargo de JUAN FERNANDO ORTEGA MUÑOZ es doctor en Filosofía y Derecho, catedrático emérito de la Universidad de Málaga, amigo personal de María Zambrano y el mayor difusor de su pensamiento como director de la Fundación María Zambrano durante más de 25 años. Entre sus numerosos libros cuenta con quince dedicados a esta autora, de los que destacamos: María Zambrano o la metafísica recuperada (1982); María Zambrano, su vida y su obra (1992); La eterna Casandra (1997); El río de Heráclito (1999); Palabras de caminante (2000); María Zambrano: la humanización de la sociedad (2001); María Zambrano: la aurora del pensamiento (2004); María Zambrano: biografía (2006); María Zambrano: la aventura de ser mujer (2007); Encuentro al atardecer (2013).