La planificación y la evaluación son dos funciones básicas del docente. Instrumentos de trabajo y mediadores entre el aprendizaje y la enseñanza. Planificar es reflexionar acerca de la práctica docente y el instrumento de trabajo más importante para el profesor. La planificación debe ser la forma en la que el docente se identifica con su labor, la guía con la que trabaja, su herramienta de trabajo. Sostener una concepción constructivista del aprendizaje, una concepción dialéctica del proceso de enseñanzaaprendizaje, implica tomar decisiones sobre los modos de trabajar en el aula, determinadas maneras de pensar las estrategias didácticas que se implementarán y, también, por lo tanto, formas concretas de pensar la planificación de esas estrategias didácticas. La planificación no es un listado de contenidos, ejercicios y actividades para el alumno, es realizar una reflexión acerca de cómo enseñamos y cómo aprenden nuestros alumnos determinados contenidos a través de una serie de proyectos y actividades que se realizan para cumplir los objetivos estipulados. La evaluación, instancia permanente en el proceso educativo, nos otorga información útil para revisar nuestras propias estrategias didácticas y las estrategias de aprendizaje de nuestros alumnos. Un libro básico para aquellos docentes interesados en mejorar su práctica diaria, pues los resultados escolares de sus alumnos dependerán, en gran parte, de la forma en la que se hayan diseñado las propuestas y de cómo se evalúen éstas.