La música, intangible, casi etérea, es hoy algo que, aunque accedamos a ella tanto como deseemos, no podemos poseer. Hubo un tiempo en que sí: los años en que su formato era redondo, cuando tenías tu música en singles, EPs, LPs, CDs En aquella época cuando la música se palpaba, sus éxitos también se alcanzaban en forma de círculo perfecto: una discográfica creía en un artista, la radio decidía apoyarlo, el oyente disfrutaba escuchándolo y acudía a comprar sus discos a la tienda que los vendía. Cuando la Música era Redonda (Con R de Radio) te acerca a ese antes de la radio y de la música. Conocer cómo fueron no será solo un recuerdo para quienes lo vivimos, también servirá para allanar el camino entre los músicos de las nuevas generaciones y sus posibles audiencias. Las teclas a tocar han sido, son y serán siempre las mismas: ingenio, colaboración, intuición, inconformismo, tenacidad, y capacidad para arriesgarse, sorprender y generar oportunidades. Luis Merino, su protagonista, ha vivido en su trayectoria profesional todas las facetas de la música: desde la comunicación hablada, escrita y audiovisual a la in