Con pan y vino se hace el camino... Partiendo de los alimentos base, la sustancia y la esencia que nos permite soñar y abrirnos a las relaciones con los demás, el hombre debe rodearse de los mejores complementos posibles. Y además del pan y el vino, las letras, las vidas no vividas por uno mismo, el pensamiento que te abre los ojos y las puertas son también el alimento básico. Un nutriente fundamental, alejado de la retórica y la parafernalia. El sencillo bocado de pan que cubre este libro, acompáñenlo de un buen vino. ISIDRO FERRER, PREMIO NACIONAL DE DISEÑO 2002.