Novela póstuma publicada en 1916 por el albacea literario del autor, Albert B. Paine, "El forastero misterioso" se sitúa especialmente en la vena satírica, y por lo tanto moral, de la obra de Mark Twain (1835-1910). De forma parecida a como sucede en su relato «El hombre que corrompió a Hadleyburg» -incluido en el volumen "El robo del elefante blanco" publicado en esta Biblioteca de autor-, la llegada de un extraño personaje a un pueblecito austriaco servirá para que se revele el verdadero carácter de la naturaleza humana y dejará tras de sí una desasosegante sensación de irrealidad.
Mark Twain es el seudónimo con el que firmaba Samuel Langhorne Clemens (Florida, Missouri, 1835-Reddind, Connecticut, 1910). Norteamericano enormemente inquieto, su vida fue un constante ir y venir. Dejó la escuela a los trece años para entrar de aprendiz en una imprenta. Realizó las tareas más diversas y, sobre todo, escribió muchísimo. Con todo, jamás abandonó los estudios y se doctoró en letras y en leyes. Viajó por América y Europa y visitó Palestina y las islas Hawai. Su vida está plagada de anécdotas divertidas que demuestran una profunda independencia personal, un rechazo total a vivir con ataduras. Dio conferencias por todas partes y fue nombrado doctor honoris causa por la universidad inglesa de Oxford, una de las más prestigiosas del mundo. Su vida literaria se caracteriza por una producción muy abundante, llena siempre de humor, de un humor que con los años se fue volviendo agrio, profundamente crítico e incluso agresivo. En algunas de sus obras, como Las aventuras de Tom Sawyer, Mark Twain narra muchos hechos de su infancia, marcada por una sociedad, según él, estrecha y puritana.