El lado frío es el lugar que se busca en la almohada cuando aquel en que se soñaba se hunde y se calienta. El lado frío de la almohada trata de los sueños que tenemos y, sobre todo, de los que no podemos tener. En el año 2003 Philip Hull, un diplomático estadounidense destinado en Madrid, se ve envuelto en un laberinto insospechado al aceptar ser el intermediario en un trato con agentes de la seguridad del Estado de Cuba. Philip Hull ha Ilegado a la última etapa de una carrera profesional con altibajos. La aparición de Laura Bahía, joven agente española de origen cubano, le Ileva a poner en duda su propio carácter escéptico, individualista, a veces generoso. La historia de amor entre ambos tiene su envés en la historia de las dificultades de la revolución cubana. Entretanto y mientras se Ileva a cabo la operación en la que participan Philip Hull y Laura Bahía, ella escribe unas cartas íntimas cuyo destinatario no es Hull sino el director de un periódico de gran tirada. El lado frío de la almohada pone en cuestión el conflicto entre el individuo y la colectividad pues, como ya dijera Marx, la esencia humana no es algo abstracto inherente a cada individuo sino que es, en su realidad, el conjunto de las relaciones sociales. pregunta por las historias que esperamos, interioríza el papel de lo no ímaginable y plantea el sentido de defender hoy la revolución cubana. Como en sus novelas anteriores, Gopegui «configura la narración en torno a la consciencia de ser narracíón», precisamente para no adherirse al efecto inquietantemente natural de las fantasías. Sin embargo, en esta ocasión, ha querido dar un paso más. No sólo mantener la conciencia de lo contradictorio sino poner la contradicción en movimiento. O tal vez, en la distancia, ajustarse a las palabras de Musil: «La historia de la literatura trata de comprenderlo y deducirlo todo. Sin embargo, nosotros hemos de intentar Ilegar a valoraciones. No han de ser simples juicios, pueden ser también voluntades». Una novela excelente, polémica, inusual.
Belén Gopegui nació en Madrid, en octubre de 1963.