Hace unos años, en El desajuste del mundo y en Identidades asesinas, Amin Maalouf nos hablaba ya de que «nuestras civilizaciones se agotan» y aportaba las razones: la desconfianza hacia el "Otro", la xenofobia, la intolerancia política y religiosa, el individualismo y la insolidaridad del nacionalismo, el racismo... Hoy en día ya nos habla directamente de «naufragio inminente». No añora, sin embargo, un pasado mejor. Solo le preocupa el futuro de esta «época desconcertante» a la que ha venido a sumarse una pandemia sobre cuyos efectos reflexiona en un epílogo de urgencia; el porvenir de las nuevas generaciones, que pueda desaparecer lo que ha dado sentido a la aventura humana, haciendo en estas páginas una llamada lúcida a la responsabilidad colectiva.Traducción de María Teresa Gallego Urrutia
Amin Maalouf nació en Líbano, en 1949. Estudió economía, política y sociología. Trabajó en el diario "An Nahar" como responsable de la sección de internacional. En 1975, cuando estalló la guerra de Líbano, se exilió en Francia en donde trabajó como redactor-jefe de la revista "Jeune Afrique". Actualmente se dedica en exclusiva a la creación literaria. Cultiva la narrativa, el ensayo y la ópera. Toda su obra está publicada en Alianza Editorial. Entre los numerosos premios que ha recibido cabe destacar el Maison de Presse por su novela Samarcanda, el Goncourt por "La roca de Tanios", y el Príncipe de Asturias 2010 en reconocimiento a toda su obra y a su empeño en estrechar lazos entre Oriente y Occidente. En junio de 2012 ingresó en la Academia Francesa.