En pleno siglo ii antes de Cristo, Roma es la máxima potencia del Mediterráneo tras haber derrotado a la Cartago de Aníbal y a los poderosos reinos de Siria y Macedonia. Sin embargo, pese a su posición dominante, ya nada es suficiente para los miembros de las familias senatoriales, ya sean Escipiones, Claudios, Fabios, Licinios, Fulvios o Sulpicios. Arrastrados por el ansia de incrementar su prestigio a través de gestas militares y la obtención del mayor número de honores y dignidades, no dudan en servirse de intrigas, alianzas y deslealtades para saciar apetitos y ambiciones personales. Es el mundo, a la postre, de unos emergentes Escipión Emiliano y Apio Claudio Pulcro, o de unos jóvenes Tiberio y Cayo Sempronio Graco, nietos de Escipión Africano e hijos de Cornelia, la matrona ejemplar. Es, también, el tiempo de un anciano y ácido Marco Porcio Catón, quien en los estertores de su vida hará famoso el célebre «Carthago delenda est», Cartago debe ser destruida. Esta es la novela de todos ellos, esta es la formidable Historia de Roma.
Juan Torres Zalba nació en Pamplona hace cuarenta y seis años. Casado y padre de dos hijas, se licenció en Derecho por la Universidad de Navarra. Actualmente ejerce como abogado en el despacho ARPA Abogados Consultores, donde dirige el área de Derecho Administrativo. En esta su segunda novela, el autor, conducido por su pasión histórica, nos abre las puertas de una época poco explorada pero extraordinaria, trasladándonos a los acontecimientos bélicos, políticos y sociales de la Roma de mediados del siglo ii antes de Cristo, aquella que se encontró en la disyuntiva de acabar para siempre con su eterna rival, Cartago. Es el tiempo de la tercera guerra púnica, pero también del germen de las guerras lusitanas y celtibéricas y de la propia autodestrucción de la república romana.