Rey desde el momento de su nacimiento por su condición de hijo póstumo, Alfonso XIII (18861941) faltó a su juramento de guardar la Constitución y las leyes al dar paso en 1923 a la dictadura militar, tras el Desaster de Annual. Pero después de la caída del general Primo de Rivera, unos simples comicios municipales celebrados el 12 de abril de 1931 las primeras elecciones rabiosamente sinceras al cabo de más de medio siglo de caciquismoadquieren el carácter de plebiscito contra el Rey perjuro, que en cuarenta y ocho horas escasas se vio obligado a emprender el camino del exilio, dejando en palacio mujer e hijos.