Los cuentos que forman En mitad de ninguna parte están protagonizados por personajes que viven al margen de las normas dictadas por la realidad. Son luchadores titánicos que buscan un espacio propio en un mundo obstinado en ponerse en su contra, que se rebelan contra la lógica imperante para mantenerse fieles a sí mismos. Ese es su triunfo.
«Un cadáver de pavo en la nevera», «Piloto suicida», «La novela incorrupta», «Nocturnidad», «Paso a nivel sin barreras», «El padre» y «No se mueve ni una hoja» son los relatos recogidos en este libro, pequeñas piezas literarias en las que se encuentra el germen de la obra de Julio Llamazares, y que resumen en cierta forma su manera de ver y de estar en el mundo.
«Yo no escribo para entretener a nadie, yo escribo para conmover, para emocionar. Por eso trato de buscar la palabra precisa, la frase, la música precisa en las palabras para producir esa ensoñación y esa conmoción.»
Julio Llamazares
Julio Llamazares nació en Vegamián (León) en 1955. Su obra abarca prácticamente todos los registros literarios, desde la poesía -La lentitud de los bueyes (1979) y Memoria de la nieve (1982)- a la literatura de viaje -El río del olvido (1990, Alfaguara, 2006), Trás-os-Montes (Alfaguara, 1998), Cuaderno del Duero (1999) y Las rosas de piedra (Alfaguara, 2008), primer volumen de un recorrido sin precedentes por España a través de sus catedrales-, pasando por la novela -Luna de lobos (1985), La lluvia amarilla (1988), Escenas de cine mudo (1994, Alfaguara, 2006) y El cielo de Madrid (Alfaguara, 2005)-, la crónica -El entierro de Genarín (1981)-, el relato corto -En mitad de ninguna parte (1995), Tanta pasión para nada (Alfaguara, 2011)- y el guión cinematográfico. Sus artículos periodísticos, que reflejan en todos sus términos las obsesiones propias de un narrador extraordinario, han sido recogidos en los libros En Babia (1991), Nadie escucha (Alfaguara, 1995) y Entre perro y lobo (Alfaguara, 2008).