El objetivo de esta obra es hacer justicia a la España republicana, sistemáticamente denigrada en las versiones de la guerra civil ofrecidas por los vencedores, que han prevalecido durante largas décadas y han experimentado un reciente resurgimiento. El alzamiento de julio del 36 no se ejecutó, como proclaman los falaces historiadores franquistas, para salir al paso de una supuesta amenaza comunista, que existió tan sólo en la imaginación de los sublevados. Fue una rebelión protagonizada por los generales africanistas y las fuerzas reaccionarias derrotadas en las elecciones de febrero para impedir la culminación de la labor reformista emprendida por la República, que atentaba contra sus privilegios.