El País Cátaro se sitúa geográficamente entre algunas ciudades más interesantes del Midi francés: Albi, Toulouse, Carcasona, Béziers y Narbona, y entre las estribaciones del macizo central francés al norte, la cadena de los Pirineos al sur y el mediterráneo al este. Un extenso territorio que fue testigo directo de la encarnizada persecución que sufrieron los seguidores del catarismo en la época medieval. Este hilo histórico sostiene actualmente el territorio denominado País Cátaro, un país acojedor, entrañable, con una sabrosa cocina milenaria y unos contundentes y rotundos caldos. Un país de castillos encumbrados, abadías románticas y góticas, importantes yacimientos megalíticos y restos de arte romano. El canal de Midi lo atraviesa longitudinalmente en un recorrido bello y apacible a través de sus ciudades más importantes. Una tierra donde se vive en francés y se ama en occitano, donde su carnaval dura meses y donde sus gentes hacen que uno se sienta en casa. La autora conoce bien ese país, viaja con frecuencia a él y procura no perderse ningún acontecimiento importante. En su comlpeta guía está casi todo y casi nada escapa al azar.