La historia trágica del príncipe Hamlet de Dinamarca es una obra tenida en todo el mundo como cimera del teatro. Por encima de las múltiples interpretaciones que ha tenido y la variedad de lecturas a la que ha sido sometida, la peripecia dramática del prícipe danés es trasunto de melancolía, locura y venganza combinadas con el remordimiento y la indecisión. Hamlet es el personaje de la meditación, de la poesía, del pensamiento abstracto que se amalgama con dudas y cavilaciones. Es la perplejidad ante la acción que nos intimida.