1. Poesía espiritual en la obra de Fernando Plata
2. Inspiración órfica en la poesía de Fernando Plata
3. Imaginación visionaria en la poesía de Fernando Plata
4. La influencia de Wallace Stevens en Fernando Plata
5. El encanto de la vida y del mundo en la poesía de Fernando Plata
6. Hímnica dicción en los poemas de Fernando Plata
7. El amor y la música en la odisea mística de Fernando Plata
8. Maestros literarios de Fernando Plata: Wallace Stevens y Jorge Guillén
9. Sentido y expresión en la poesía de Fernando Plata
10. Salvación a través de la poesía de Fernando Plata
En Fernando Plata tenemos a un joven poeta cuyo apellido ya indica cierta voluntad alquímica, pues concibe la poesía como transfiguración del sujeto o el objeto, pero desde la pura vigilancia de la conciencia. Y lo que más le importa es reflejar el encanto de la vida y del mundo, en poemas llenos de fuerza y con una dicción hímnica y de fe en esas criaturas del mundo órfico, los altos a los cuales dirige sus himnos. Dotado de profunda imaginación, escribe una poesía visionaria, sometiendo a sus imágenes a una idea rectora, de tal modo que el sentido preside la expresión. Sus ideas de orden proceden de Wallace Stevens, poeta de la imagen no surrealista, pero sí fantasiosa y plena. A Stevens y a Jorge Guillén los celebra como maestros, y su odisea mística está atravesada por el amor y la necesidad de la música. Como señala su prologuista y mentor, José Luis Rey, «Fernando Plata escribe una honda poesía espiritual y nos la entrega como quien ha seguido de cerca al sol hasta la caída de Faetón, para volver a alzarse en brazos de los altos, los seres mágicos y órficos en los cuales la poesía se ha cumplido en plenitud. Y esa plenitud es garantía de salvación. En este primer libro, un libro de himnos para el siglo XXI, el muchacho vigía de la Costa da Morte, con una poesía situada en el límite entre canto y eternidad, ambiciosa y a la vez humilde, nos regala una verdadera aventura del espíritu».
Fernando Plata es, como su admirado Georg Trakl, farmacéutico por tradición familiar. Himnos a los altos es su primer poemario, que se presenta prologado por José Luis Rey (Córdoba, 1973), uno de los autores más reconocidos y prestigiosos de su generación y de la poesía española actual. El también ensayista y traductor dio por cerrada su obra en verso, formada por ocho libros fundamentales, con El dorado (2023), e inicia con estos Himnos el itinerario de su heterónimo.