En pleno siglo de las Luces y del universalismo de la razón abstracta, Herder aborda el estudio detallado de cada cultura con su singular peso específico. Acertó al indicarnos que cada una de ellas poseía luz propia y una particular manera de existencia, y que ambas se realizan a través de todas las demás formas de expresión humana, es más, son su distintiva alma. Nos hallamos con una de las razones por las que nuestro autor ha impactado significativamente en América Latina y en los sitios donde, por razones diversas, se encuentran en algún laberíntico proceso de búsqueda de identidad.Este libro es una aportación a la teoría de la cultura fundamentada en la originalidad y vigencia de un pensamiento que se mueve entre el multiculturalismo y el interculturalismo.