Una novela corta de uno de los escritores más destacados de la literatura universal, Fiódor Dostoievski, que ofrece a partir de esta magistral narración una lúcida y dolorida reflexión sobre las interioridades del carácter ruso, en cuyo fondo se deja entrever un indudable trasunto biográfico.
Aleksei Ivanovich, un joven honrado y de carácter noble, es tutor de la familia del general ruso Zargoryansky, alojada en un hotel de la ciudad ficticia de Roulettenbourg. Está enamorado de la hijastra de este, Polina Aleksandrovna, aunque no se atreve a confesárselo, lo que lo lleva a vivir en una desesperada agonía mientras la joven se aprovecha de su sumisión. Entretanto, en un ambiente de compulsiones y vicios, una serie de personajes desarraigados y fatalistas en torno al protagonista se ven envueltos en tramas donde se entremezclan los dos grandes impulsos capaces de enajenar al ser humano, la pasión y el juego, y donde el azar tendrá un papel decisivo en el porvenir de cada uno.
Fiódor Mijáilovich Dostoievski (Moscú, 1821?San Petersburgo, 1881), autor de algunas de las obras más importantes de la historia de la literatura, como Crimen y castigo (1865) o Los hermanos Karamázov (1879), fue además militar y periodista. Encarcelado en 1849 y deportado a Siberia por conspirar contra el zar, gran parte de su vida está marcada por las dificultades económicas, por una salud delicada y sus problemas con el alcohol y el juego. Títulos como El jugador (1866) y Memorias de la casa de los muertos (1862) contienen una fuerte carga biográfica, pero será en Diario de un escritor, el último proyecto en el que trabajó Dostoievski, donde quedará recogida la visión más personal de su autor.