El rodaje de la película basada en También esto pasará desatará en Milena Busquets una avalancha de imágenes sobre el paso del tiempo. En 2015, Milena Busquets publicó También esto pasará, una novela que destilaba el dolor de la pérdida de su madre y la reafirmación de la vida con una mezcla inconfundible de ligereza y lucidez. Diez años después, mientras se rueda su adaptación cinematográfica, la autora regresa al mundo que ha descrito y reinventado. Y ese retorno es, a la vez, un vértigo y un anhelo: «Me quiero quedar aquí confiesa. Y que todo vuelva a empezar».La dulce existencia es un relato atravesado por la búsqueda de la belleza y por el peso de la memoria. Los vientos y la luz dorada de Cadaqués, las mañanas en el Casino, el magnetismo de los actores y productores, el coqueteo, los restaurantes de playa, los libros de cabecera Todo ello en un vaivén constante entre la realidad y la invención, entre lo que se vive y lo que se recuerda.Para Proust, la literatura era el arte de fijar el tiempo, de esclarecer la impresión de los recuerdos. Y eso es, precisamente, lo que hace este libro: reconstruir con la nitidez y también con la melancolía que da la distancia aquellos días en los que Milena Busquets vivía sin ser consciente de que estaba siendo feliz, días en que todo estaba por delante. Un viaje al paraíso antes de la conciencia de su pérdida.