Quitarse un peso de encima. Tal vez sea eso vivir. Desprenderse de envolturas, cáscaras. Aderezarse con aromas, sabores. Ser uno mismo. Un cuerpo. Una memoria. Ser o haber sido una niña gorda. Una niña gorda adelgazada. Llenarse de recuerdos y comidas. Observar la vida de otros desde una ventana. O contemplar el plato ajeno. Y es entonces cuando el curso de las historias se agolpan y se ordenan, creando sentidos y vacíos que debemos completar. Cuando el lector asiste y se alimenta de la literatura voraz y exquisita de Mercedes Abad. De un menú de cuentos y un personaje principal. Sírvanse. Se leen al gusto. Buena lectura.
Mercedes Abad nació en Barcelona en 1961. Estudió Ciencias de la Información en la Universidad Autónoma de esta ciudad. Se estrenó como escritora con Ligeros libertinajes sabáticos (1986), un libro de cuentos que fue galardonado con el Premio La Sonrisa Vertical. Ha publicado los libros de relatos Felicidades conyugales, Soplando al viento y Amigos y fantasmas, ganador del Premio NH Vargas Llosa en 2004. En el año 2000, publicó su primera novela, Sangre. Además de los libros de narrativa, es autora también del ensayo Sólo dime dónde lo hacemos, y de guiones de radio y obras teatrales como Pretèrit perfecte, Se non è vero y Bunyols de Quaresma. Ha realizado la versión teatral de Las amistades peligrosas, de Christopher Hampton, y ha colaborado en la dramaturgia del espectáculo XXX con la adaptación de La Filosofía en el tocador, del marqués de Sade, producida por La Fura dels Baus. Es colaboradora habitual de diversos medios de comunicación. Sus crónicas para el suplemento Cataluña de El País han sido reunidas en el volumen Titúlate tú.