El Frente de Asia-Pacífico es a día de hoy el escenario bélico más desconocido de la Primera Guerra Mundial. Ensombrecido por las trincheras del Frente Occidental o las campañas de Oriente Medio, e incluso por la otra Guerra del Pacífico librada entre 1941 y 1945, también durante la Gran Guerra se combatió en tierras tan alejadas de los teatros principales como China, Nueva Guinea, Polinesia o las costas de India, Malasia y Chile. Activo entre 1914 y 1918, en el Frente de Asia-Pacífico se enfrentaron los Aliados contra las colonias de Alemania en la región. Ostentando Japón el liderazgo de una coalición antinatural con británicos, franceses, rusos, australianos y estadounidenses, atacaron juntos todos los dominios alemanes. El Asedio de Tsingtao, que desangró al Ejército Japonés, la invasión australiana de Nueva Guinea, el desastre naval de la Escuadra Británica en la Batalla de Coronel, el bombardeo alemán de Tahití, los amotinamientos indios de Singapur, la derrota franco-rusa en Penang o las epopeyas de los cruceros corsarios Emden y Wolf, entre muchos otros acontecimientos, son los episodios que, con