Esta obra está concebida como un ensayo interpretativo estructurado en tres partes. La primera se dirige a aclarar el concepto de «constitución», es decir, el objeto sobre el que pivota cualquier reforma constitucional, un primer paso ineludible porque no todo lo que se entendió en su día como constitución era compatible con la idea de reforma. La segunda parte analiza la idea de «reforma constitucional»: tras aclarar el sustantivo constitución corresponde a continuación dar sentido al verbo reformar. El tercer y último apartado del libro trata de mostrar la aplicación en la práctica de la idea de reforma constitucional o, lo que es lo mismo, presenta el tránsito del mundo de las doctrinas al terreno fáctico sin abandonar por ello la visión histórica, ya que ha de determinarse cómo se planteó la reforma constitucional en nuestra historia contemporánea. Solo tras este análisis se podrán plantear los interrogantes a los que necesariamente debe enfrentarse un país para afrontar una reforma de la constitución: cuándo, cómo, cuánto y qué debería poderse modificar de un texto constitucional.
Ignacio Fernández Sarasola es Profesor Titular de Derecho Constitucional en la Universidad de Oviedo.