L a subcontratación en el sector de la construcción constituye hoy una realidad económica y productiva indiscutible, que es objeto de regulación jurídica. La novedad en esta materia la introduce la Ley 32/2006, que aborda, por primera vez, un régimen tendente a introducir garantías en la cadena de contratación y en la seguridad y salud de los trabajadores. Particularmente, las cautelas de esta nueva Ley descansan en la exigencia de determinadas condiciones para los niveles de subcontratación, en los requisitos de calidad o solvencia a las empresas que vayan a actuar, así como en los mecanismos de transparencia mediante exigencias documentales y el reforzamiento de la participación de los trabajadores en las distintas empresas que intervienen en la obra. Se trata, en definitiva, de una regulación de gran trascendencia, que plantea cuestiones y problemas aplicativos innegables, afectando al objeto y ámbito de la ley, a los requisitos exigibles a los contratistas y subcontratistas, al régimen de la subcontratación, a las figuras contractuales típicas del sector, a la intervención de los trabajadores autónomos, a la prevención del riesgo laboral y a las responsabilidades derivadas del incumplimiento de los nuevos deberes empresariales. A éstas y a otras cuestiones anudadas a la Ley se dedica la presente obra con la finalidad de conocer en profundidad el alcance y los efectos de este nuevo régimen jurídico, de interés sin duda para todos los profesionales, así como para los propios empresarios, asesores y responsables jurídicos de las empresas que desarrollan su actividad en el citado sector de la construcción, y de facilitar su aplicación en el momento de su entrada en vigor, asumiendo sus distintos contenidos especialistas acreditados en la materia.