KAFKA, FRANZ / BARCELÓ, MIQUEL
Leí La Transformación cuando tenía 13 o 14 años, en una noche, de un tirón. Tal vez incluso dos veces seguidas, como acostumbraba a hacer en ocasiones. Al día siguiente, cuando regresé de la escuela, encontré a mi madre que la leía llorando, mientras que a mí me había parecido más bien divertida y perturbadora. Mi madre lloraba solo con pensar que yo había leído AQUELLO. Después la he releído varias veces. Quizá cada década. La considero como una especie de cómico esencial y moderno (como Cervantes). A medida que pasan los años y los acontecimientos se suceden, encuentro a Franz Kafka más pertinente, con ese humor que se tiene por judío pero que no es sino una forma muy antigua de humanismo... una cósmica desesperanza... Transformación: cambio. El único que no cambia es Gregor Samsa, adelgaza a lo sumo, pero es el mismo desde que despierta hasta el final. A su alrededor todo se transforma. Su padre, su madre, su hermana pequeña. El mundo exterior cada vez más amenazante que adivinamos a través de los resquicios de las puertas y ventanas. Con cada lectura, uno toma consciencia de algo que había olvidado hace
(Praga, 1883 - Kierling, Austria, 1924). Alemanez idatzi zuen idazle txekiarra. Judu alemaniarren semea zen. Pragako aseguru konpainia batean lan egin zuen, baina gogotik lotu zitzaion literaturari. Bere lanik gehienak bera hil ondoren argitaratu ziren, nahiz eta Kafkak berak guztia suntsitzea agindu zuen. Liburu honetan euskaraturik argitaratzen ditugun 39 kontakizun laburrez gain, badira beste hainbat eta lau eleberri: Itxuraldaketa (1915), Prozesua (1925), Gaztelua (1926), Desagertutakoa (1927).