La vida instrucciones de uso fue considerada desde su aparición una obra maestra, y con los años su importancia no ha dejado de crecer. Así, este monumento literario inclasificable –del que se ha dicho que es un compendio tan enciclopédico como la Comedia de Dante o los Cuentos de Canterbury de Chaucer, y, por su ruptura con la tradición, tan estimulante como el Ulisesÿ de Joyce– fue galardonado como la mejor novela de la década 1975-1985 en la encuesta realizada por Le Monde, y, cuarenta años después de ver la luz por vez primera, sigue deslumbrando a nuevas generaciones de lectores por su creatividad inusitada, su lúdica inteligencia, su alianza, tan inhabitual como triunfante, de sofisticación formal puntera y genuina capacidad adictiva.Entre la primera idea de la novela y su realización transcurrieron nueve años. Perec hablaba así de su proyecto: «Me imagino un edificio parisino al que se ha quitado la fachada... de modo que, desde la planta baja a la buhardilla, todos los aposentos que se hallan en la parte anterior del edificio sean
Poeta y narrador francés, apasionado por las palabras cruzadas, los acrósticos y los juegos de
la imaginación, admirado por Calvino y Cortázar, surrealista impenitente, muestra hasta qué punto quien piensa en
comprender el mundo no hace más que clasificarlo, esa vocación por la que Perec sentía especial fascinación.