«Desde que las universidades estadounidenses pusieron de moda que escribir un libro es antes un mérito administrativo y un plus para mejoras contractuales que un ejercicio serio de conocimiento, el alud de información en el mundo de la crítica literaria occidental, animado por las facilidades mecanográficas de la tecnología, se ha vuelto indigerible para cualquier ser mortal. A estas alturas, uno duda de la necesidad de decir algo nuevo sobre una novela como La vorágine, pero la belleza de la edición que se propone Artemisa me anima a dar mi parecer sobre el estado de la cuestión, pues hace ya muchos años que la obra de José Eustasio Rivera forma parte de mis libros más amados. Dirigiendo mis pasos críticos por el camino más corto y alejado de la bibliografía más selecta sobre La vorágine, hoy creo, junto al poeta mexicano José Juan Tablada que se nos anticipó a todos, que es imposible leer esa novela colombiana, desde la tradición literaria occidental, y no sólo desde la latinoamericana, sin vincularla a un texto narrativo de Joseph Conrad: El corazón de las tinieblas.» [Juan Manuel García Ramos]