Después de localizar el lugar donde estaban los restos de su abuelo, Emilio Silva consiguió exhumar su cuerpo y el de doce personas más que yacían en una fosa común, tras ser asesinados por fanáticos falangistas durante la Guerra Civil. En su libro Las fosas de Franco, Silva narró su historia y generó uno de los debates politicos más importantes de los últimos años sobre la recuperación de la memoria histórica. Muchas cosas han pasado en los dos años que han transcurridos desde su publicación, y Silva cuenta en esta nueva edición la segunda parte de una de las historias más emblemáticas de la España contemporánea.
Nació en Elizondo, provincia de Navarra, en 1965. Durante su infancia pasó los veranos en Pereje, un pequeño pueblo del Bierzo de donde era originario su abuelo, Emilio Silva Faba, que murió asesinado en octubre de 1936 por ser militante de Izquierda Republicana. Licenciado en Sociología por la Universidad Complutense de Madrid, ha dedicado su vida profesional al periodismo escrito. En marzo del año 2000 encontró el lugar donde se hallaban los restos de su abuelo y de otros doce hombres. Siete meses después, con ayuda de un grupo de arqueólogos, forenses y otros voluntarios, exhumó los restos de los conocidos como «los trece de Priaranza». A raíz de aquella exhumación fundó, con Santiago Macías, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, de la cual es presidente. Desde entonces compagina su labor profesional con la ayuda a los cientos de familias que se han puesto en contacto con la Asociación para encontrar a sus familiares desaparecidos.