Siglo xv, Hugo de Covarrubias decide renunciar al destino que su padre, un mercader de lanas, le ha marcado. Su decisión hace que abandone Burgos, pero también a Berenguela, su íntima amiga, y a su ambicioso hermanastro Damián, que ansía hacerse con la empresa familiar. Pero todo cambia al descubrir que su padre está siendo traicionado. Se ve obligado a huir para salvar la vida embarcándose en un ballenero vasco, en el que conoce a Azerwan, un fascinante hombre que se define como contador de leyendas y con quien compartirá en África un prometedor negocio de venta de sal.
La venganza le hace escapar de nuevo, esta vez con una mujer, Ubayda, y un extraordinario halcón, Aylal, en busca de su verdadero destino: aprender el arte de las vidrieras.
Una novela épica y de aventuras que se desarrolla en escenarios tan dispares como el desértico norte de África, la inexplorada Terranova y algunas de las más pujantes ciudades europeas de la época (Brujas, Lovaina o Burgos) y sus catedrales, en un tiempo en el cual sus viejas paredes se fueron abriendo para convertirse en auténticos sagrarios de cristal, ante los cuales los fieles creían sentirse a los pies de las ventanas del cielo.
Gonzalo Giner debutó en el mundo literario en 2004 con el libro La cuarta alianza, pero fue la novela El sanador de caballos, su proyecto más personal, la que alcanzó cotas de crítica y público más elevadas. Desde entonces su autor se ha convertido en un referente dentro de la literatura popular. Veterinario de profesión, con aquel título quiso investigar el origen de su oficio; con su nueva obra, El jinete del silencio, el autor nos descubre los antecedentes de la creación de la raza española de caballos durante el siglo xvi. Dotada de una gran emotividad gracias a la presencia de un protagonista inolvidable como Yago, que verá mejorar sus trastornos de conducta a través de los caballos. El jinete del silencio es un bello homenaje al caballo y a nuestro pasado.