«Peter Sloterdijk se acerca más que ningún otro filósofo al desconcierto actual».
Süddeutsche Zeitung
¿Qué impulsa a la humanidad hacia delante? El aprendizaje de la historia ¿es lo que orienta el progreso? Este tipo de preguntas y las respuestas habituales ;normalmente desacertadas; oscurecen poco a poco el paso de una generación a otra. En el éxito o el fracaso de este tránsito generacional entra en juego la supervivencia de la civilización que conocemos.
Según Peter Sloterdijk, Europa (superada después por su filial cultural norteamericana) transmitió a casi todos los demás conjuntos étnicos un legado paradójico y fatuo: el mensaje de la herencia. Y, así, Europa y Estados Unidos, en nombre de la joven, voluble y agresiva diosa Libertad, llevaron hasta las regiones más alejadas un arriesgado experimento;
Las modernas generaciones de padres son débiles desde un punto de vista civilizador, de forma que estos progenitores potencialmente terribles solo pueden aportar una descendencia con este mismo potencial. En este sentido, Los hijos terribles de la Edad Moderna podría considerarse un libro negro, pero extraordinariamente revelador, sobre las generaciones venideras.
Peter Sloterdijk (Karlsruhe, Alemania, 1947) , uno de los filósofos contemporáneos más prestigiosas y polémicos, es rector de la Escuela Superior de Información y Creación de Karlsruhe y catedrático de Filosofía de la Cultura y de Teoría de Medios de Comunicación en la Academia Vienesa de las Artes Plásticas. De su extensa obra pueden destacarse, entre otros, su novela El árbol mágico y sus libros ensayísticos El pensador en escena, Eurotaoísmo, Extrañamiento del mundo (Premio Ernst Robert Curtius 1993) y El desprecio de las masas.